¿Te gustaría tener más de una fuente de ingreso?
Probablemente tu primera respuesta sea sí. Pero luego comenzamos a cuestionar y a dudar de cómo podría ser eso. Si tal vez en este momento trabajamos más de 8 horas al día, a qué hora o de qué forma se podría dar esto en nuestra vida.
Fuentes de ingreso son todas las formas en cómo puede llegar dinero a tu vida. No existe sólo una forma de que llegue dinero a tus manos. Sin embargo, muchas veces pensamos que existen pocas o incluso sólo una manera.
Esto sucede porque hemos aprendido que, o somos empresarios o somos empleados. Para cada uno de estos tenemos ciertas ideas preconcebidas de que significa ser empleado o que significa ser empresario.
Podemos creer cosas como que ser empleado es tener estabilidad y seguridad en tu vida o que ser empresario es arriesgado e inestable. Por el contrario, podemos creer que ser empleado te limita y que ser empresario es lo único que te puede hacer crecer económicamente.
No podemos generalizar, todo depende de tus objetivos personales y tu estilo de vida. Lo cierto es que podemos tener tantas fuentes de ingreso como queramos. Necesitamos solamente enfoque y decisión. Antes de pensar en cuantas fuentes de ingreso queremos e ir creando estrategias para lograrlo debemos poner ciertas cosas en orden.
Por ejemplo, aprender a cobrar y saber cuánto vale lo que quiero vender sea un producto o mi tiempo, va a ser clave para conseguir nuevas fuentes de ingreso.
Si quieres comenzar a invertir para tener otra fuente de ingresos también es importante educarte y entender los distintos tipos de inversiones que existen.
Otra forma de crear más fuentes de ingreso es comenzar con una nueva empresa o con un emprendimiento. Uno de los errores más comunes con los emprendimientos es que queremos que todo sea perfecto para comenzar, esto nos puede estar limitando para tener esa nueva fuente de ingreso. Te animo a que comiences, nunca estará todo perfecto porque hay cosas que irás aprendiendo con la experiencia en el camino. Puedes tener un trabajo que sea tu canal e ir paralelamente construyendo tu empresa. Dedicándole unas cuantas horas al día y sin dejar tu trabajo.
Por último, piensa en el balance en tu vida, no todo en la vida es trabajo. ¿Cómo te gustaría que sea tu día a día? ¿En qué momentos compartirás con tus seres queridos? ¿Te gusta viajar y te gustaría hacerlo más seguido? Todas estas son preguntas que te puedes hacer antes de determinar qué tipo de fuentes de ingreso quieres construir y a qué le vas a dedicar tu recurso más valioso: tu tiempo.
Recuerda que somos cada uno de nosotros lo que nos limitamos o nos expandimos con nuestras creencias y con nuestra actitud. Ponerles atención a estos dos factores será clave para que tus fuentes de ingreso crezcan y te permitan vivir una vida sin límites y llena de paz.
Por: Katina Zeda – Redes Sociales: Instagram: @katinazedan Facebook: Katina Zedan
