“La mujer sabia edifica su casa; mas la necia con sus manos la derriba.” Proverbios 14:1
Toda mujer necesita recordar la importancia de su rol como educadora y transmisora de valores dentro de su hogar y de la sociedad. Es indispensable que las mujeres asuman ese rol, independientemente de sus demás ocupaciones, ya que esto traerá grandes beneficios personales, familiares y sociales. Siempre he considerado pilar de acero a las mujeres que se conducen a diario con valores claros y bien cimentados. Una mujer que tiene claros sus valores, tendrá siempre claras sus prioridades y esto le permitirá tomar mejores decisiones en tiempos difíciles. Yo promuevo esto a diario en mis redes, asesorías y conferencias.
En mi experiencia como asesora y educadora en valores, muchas mujeres saben lo que quieren desde antes de llegar a mi oficina a recibir asesoría. Pero lamentablemente el temor por buscar algo nuevo o asumir retos más grandes se apodera de ellas. He descubierto y comprobado que, si tienes claros tus valores, es más fácil establecer prioridades y tomar decisiones correctas.
Mujeres con valores claros es lo que la sociedad necesita porque a través de su ejemplo, otras personas se sentirán inspiradas a vivir de la misma manera, inspirando así a las generaciones por venir. No basta solo con decir, no es suficiente enunciar los valores, también es necesario vivirlos intencionalmente a través del ejemplo. En estos tiempos necesitamos mujeres que inspiren, mujeres genuinas, mujeres dispuestas a apoyar a otras a brillar, mujeres que luchen por esparcir valores dentro de la sociedad, una sociedad dentro de la cual sus hijos se van a desarrollar.
Mujer, tu que estás leyendo esto, déjame decirte que tú vales por el simple hecho de existir. Sabiendo esto, quiérete, cuídate, aprende algo nuevo cada día, dedícate diariamente a lo que te apasione y marca la diferencia en tu vida y en la vida de otros. No te compares con otras mujeres, cada una tiene su propio camino que recorrer. Todas enfrentan obstáculos, pero lo que te hará sobresalir es qué tan bien enfrentas estos obstáculos y la lección que te quede de esas situaciones.
Recuerda que la perfección no es una realidad, las mujeres más exitosas han construido su vida y carrera reconociendo cuando se equivocan, aprendiendo de esos errores, evitando cometerlos de nuevo y perseverando.
Permítete vivir, sentir, afrontar retos, emprender, enseñar, aprender y por sobre todo permítete amar y ser amada.
Bendiciones.
M.A. Irene Tobias
Magíster en Educación en Valores
Certificada en Coaching por Valores y Coaching de Vida
Certificada en Disciplina Positiva en la Familia
Fundadora de ARETÉ, Empresa de educación en valores
