Por: Dra. Claudia Núñez Núñez – Viña Del Mar
¿A quién no le ha pasado cuando mira al espejo? Esperar que él nos hable y nos diga lo lindas que somos, o mirarnos y hablarle de nosotras mismas. Lo cierto es que de una u otra forma, las diversas experiencias que hemos transitado en nuestra vida, han impactado en la manera en que nos percibirnos.
Cuando hablo de mirarnos hacia el interior, tiene un significado especial, ya que es complejo y de mucha valentía entrar a un espacio con profundidad en el que encuentras un mar de vivencias , emociones y recuerdos que se asemejan a surfear una ola, en la que nos sumergimos y revolcamos, provocando en nosotras cierta desesperación y angustia ante la incertidumbre que nos provoca transitar por diversos estadios del proceso de nuestro crecimiento cuando nuestro Yo Superior nos habla, y expresa lo importante que es tomar conciencia sobre mirarnos al espejo. Resulta útil pactar una tregua y establecer un compromiso de ayuda mutua en aquella instancia de reflexión. Así entonces que el proceso de comunicación, nos lleva a un viaje con lo más profundo de la tierra, nuestra raíz, nuestro ser.
Cambio profundo desde nuestro interior
El espejo significa experimentar el cambio profundo y consciente de nuestro ser, cuyo significado se asocia a la transformación, a la vida misma, desde otro matiz, pero con la misma alma. Marolen Martínez (2022) dice que: “nacemos para crecer, aprender, vivir, enseñar y morir, porque cada una de una es arquitecta de su propio destino, tú misma decides qué hacer con tu vida: un edén de paz, tranquilidad, sabiduría, amor felicidad, o una batalla sin fin, donde lo único que podrías atraer son problemas, discusiones e intranquilidad». Atendiendo a esta aseveración, las interrogantes que podemos plantearnos son:¿Cuántas veces hemos sentido la necesidad de huir de nuestros propios fantasmas, miedos, inseguridades, barreras que surgen de nuestro interior y que nos hacen revivir recuerdos del mundo interno que no deseamos seguir experimentando?,¿Cómo podemos lidiar con ellos si nos hacen sumergirnos en un lugar frío, inhóspito? Muchas veces nos miramos y ciertamente sucede que independiente de lo que te digas en voz alta : “lo fuerte, capaz, bella, valiente y exitosa que eres, y que puedes tener todo lo que deseas”; “si tienes creencias limitantes , da lo mismo el apellido que le pongas a una frase, éstas condicionan tu vida” (Correa, 2021). Desde estas perspectivas, nuestro verdadero cambio se encuentra en la forma en que nos percibimos, miramos, amamos y sentimos, cuando el espejo nos habla mediante el silencio lo que somos y lo que deseamos, visualizando la realidad, la verdad que nos hace humanos; en ese lugar que conforma nuestro recorrido hacia nuestra propia luz interna.
Real significado
“Espejito espejito, dime algo bonito”; es aquel espacio que guarda relación con aquel lugar de nosotras mismas, nuestro ser que nos abriga y nos hace tomar conciencia de lo esencial, de lo importante que somos y el valor que poseemos. Independiente de la profesión, status, lugar donde habitemos, la marca de ropa que llevamos puesta, o simplemente muestra raíz; a pesar de ello, nuestra integridad, valentía y coraje… la entrega en todo lo que somos y hacemos en los diversos contextos en que nos desenvolvemos; es expresión de nuestro potencial.
Finalmente, cuando nos miramos al espejo, y percibimos en nuestra totalidad, podemos darnos cuenta que somos una hermosa sincronía, un fluir como lo hace el agua en la cascada, o quizás como lo experimentan los árboles al vaivén del viento, bailando al compás de la energía sublime de la vida misma.
