Los sistemas de gestión ayudan a mantener el equilibrio entre los procesos de una organización.
La gestión de calidad se centra no solo en la calidad de un producto, servicio o la satisfacción de sus clientes, sino en los medios para obtenerla.
Esta no solo abarca los sistemas internacionales certificables, sino que también los sistemas internos que tenemos en los negocios para asegurar la calidad y el control de nuestros procesos.
Por lo tanto nuestros clientes van a reconocer que la calidad ya no es solo un atributo importante para los productos y servicios sino que un modo de vida y de trabajo para darles lo que ellos han requerido.
Así que esta influencia que tenemos sobre el pensamiento de la calidad, se ha ido expandiendo a aplicaciones no tradicionales como lo ha sido manufactura de productos, estos son también los servicios de mensajerías, notariado, mercadeo, ventas, transportes, etc.
Un sistema de gestión es una gran herramienta la cual permite a cualquier negocio la Planeación, Ejecución y Control de sus actividades las cuales son necesarias para llevar a cabo la misión y visión, a través de altos estándares en la prestación de su servicio, los cuales son medidos por indicadores de desempeño y tener control a través de la documentación de las actividades que se realizan.
¿Cuáles son los beneficios de un sistema de gestión?
Para los clientes:
1. Recibir sus servicios de forma puntual, eficiente y de calidad.
2. Ahorrar esfuerzos y dinero por no tener que repetir los pedidos.
3. Eliminación o disminución de quejas o reclamos.
4. Una buena recomendación.
Para el personal:
1. Tener indicaciones claras y especificas.
2. Aumenta la satisfacción de sus actividades diarias.
3. Reduce el tiempo por retrabajos.
4. Hay un mejor clima organizacional.
Para el negocio:
1. Mejor imagen ante los clientes.
2. Servicio de responsabilidad.
3. Disminución de trabajos mal realizados.
4. Mejor utilización de los recursos.
5. Mejor relación con proveedores.
6. Disminución de demoras en entregas de pedidos de los clientes.
7. Contar con instrucciones claras a través de procedimientos estandarizados.
8. Lograr un fuerte compromiso con los objetivos del negocio.
9. Permite conocer las deficiencias que se tienen y planear nuevas mejoras.
10. Aumenta la satisfacción de los clientes.
Un sistema eficaz puede ayudar a un negocio tener una exitosa calidad, innovación tecnológica y rentabilidad.
Escrito por: Marisol Pereira, desarrollosmq@gmail.com
