Actualmente los padres deben brindarle a los niños la libertad de utilizar los elementos que tienen a su alrededor que les permita producir o crear algo novedoso, por ejemplo, pueden ser elementos externos que los infantes obtienen a través de sus experiencias con el mundo o a través de sus percepciones.
Además no se debe limitar el potencial creativo de los niños en cuestiones del «deber ser» o de estereotipos de género, ya que los niños pueden expresarse a través del juego y es así como logran desarrollar esa creatividad, por ejemplo, un niño que le gusta jugar a la cocina, puede convertirse en un gran chef cuando sea adulto.
«La creatividad a veces es poco valorada porque se gratifica más a cosas muy concretas, por ejemplo, en cuestión de las profesiones, se les inculca a los niños que deberían ser médicos o ingenieros, en lugar de artistas o músicos, lo cual es un error porque en todas las profesiones existe creatividad», explicó la especialista.
La creatividad es un proceso innato que podemos desarrollar a lo largo de nuestra vida y ayuda también al desarrollo integral de cualquier ser humano, por ello es importante desarrollarla desde etapas tempranas, sin limitaciones.
Otra forma en la que los niños pueden desarrollar aún más su creatividad es a través de la lectura, incluso se le puede pedir que invente su propio cuento.
Por último, la creatividad tiene muchos beneficios en la salud de los niños, pues les permite ser más seguros de sí mismos, por lo tanto, está relacionado con una buena autoestima, son más tolerantes a la adversidad porque se enseñan a dar soluciones a un mismo problema, y también son más resistentes a la frustración.
