Desde siempre, el papel de la Mujer, ha sido intenso y tratar de analizarlo nos hará caer en un berenjenal imposible de salir, como género será siempre nuestro otro yo y el complemento perfecto para poder decirnos humanidad.
Esto queridas lectoras, no se trata de un tema de competitividad, sino de existencialidad, dónde el papel preponderante de la mujer, nos remonta a la historia y podemos ver su gran aporte en todas las culturas y sociedades, forjando y formando el carácter en todas las generaciones, mientras el actuar del hombre era conseguir la provisión para subsistir y juntos siempre esforzarse por el hogar, que sería siempre el punto de partida para establecer lo que conocemos como Familia.
La capacidad de la mujer, siempre ha estado presente en el caminar de la historia y aunque han existido grupos con el objetivo de menoscabar ese potencial, se han ido debilitando como el nadar contra corriente y es lo que conocemos como una simple llamarada de tusa.
La figura de mantener un hogar con los quehaceres se ha venido diversificando a tal punto de ganarse funciones que siempre habíamos visto en el trabajo de los hombres como tal, pero siempre lo hemos sabido, que ambos géneros tienen la misma capacidad de dominar cualquier rol a desempeñar.
Definitivamente, lo más grande que ha conquistado la mujer de hoy, es ese cúmulo de prejuicios antiguos, como la intrascendencia, la desventaja, la inferioridad y la incapacidad, que hasta la mujer misma lo retenía pasa si, y creían que eran los ciudadanos de segunda categoría, pero no. Fue un vil pensamiento que cayó por su propio peso, al saber que el papel de la mujer era en sumo importante para el actuar humano desde siempre. Fue un verdadero despertar para la humanidad y otro punto de partida, con una visión acertada para todo ser humano.
Por supuesto, esto no ha sido fácil, ha llevado su lucha tesonera de hacerse un espacio fundamental y ganarse el respeto y admiración como mujeres y hacedoras de la humanidad. Los hogares de hoy, han migrado sus formas de ser y de pensar y han asumido los nuevos roles de la mujer de hoy, han conquistado otros espacios y otras funciones, no por la lucha contra el hombre, sino por participar con todas las libertades de construir mejores sociedades, con mejor calidad de vida, en la sostenibilidad de las unidades sociales, como lo son las familias y las exigencias que impone el nuevo mundo y los tiempos de hoy.
En los últimos 43 años de la historia de la humanidad, la mujer ha librado luchas sobre el género y la dignidad como mujer, fue así como la Organización de
Naciones Unidas -ONU- Declaró en 1975, como el Año Internacional de la Mujer, con el respaldo de todos los países, se empezó a dignificar a la mujer como tal en todas sus virtudes y exaltando sus valores intrínsecos como Madres de todas las generaciones.
Hoy, uno que integra el género opuesto, lo único que piensa es:
“Mujer… Ese ser maravilloso que hace de mi tiempo intenso para disfrutar junto a ella nuestra propia existencia”.
Escrito por Antonio Moran del Cid.
